No sólo el inusual clima boreal jugó un papel desfavorable en la economía de Alemania. Angela Merkel, su canciller, afirmó también que la crisis de Ucrania estaba afectando el crecimiento económico.
«Hay algunas incertidumbres que no quiero ocultar, como toda la situación de Ucrania y Rusia en la que tenemos un gran interés de que nuestras relaciones internacionales sean otra vez constructivas», dijo Merkel en una rueda de prensa que ofreció con el presidente español, Mariano Rajoy.
La mayor economía de Europa se contrajo un 0,2% en el segundo trimestre del año por primera vez desde fines de 2012, tras una fuerte expansión del 0,8% en el primer trimestre. Ahora, la administración financiera del país espera para el resto del año un crecimiento del 1,8%.
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